El diario El Nacional a pesar de los problemas de papel, censura y todo el contexto país ha logrado sobrevivir durante décadas las opresiones, saliendo siempre con el lema en alto de la lucha por la libertad de expresión y por vivir en democracia, así lo afirmó Cenovia Casas, gerente editorial del periódico, durante la charla “Los nuevos desafíos del periodismo en Venezuela”.
Aunque los periodistas venezolanos sufren el régimen más represivo de la historia, su labor está en poder contar la verdad más allá de los desafíos que se presenten, uno de ellos es cómo las nuevas tecnologías perjudican a los medios tradicionales y el cómo lo “inmediato” mata a lo impreso. Los periódicos han venido adaptándose a estos cambios, y los que lo han logrado han comprendido que la calidad de la noticia se ha ido perdiendo por la inmediatez que generan las plataformas de redes sociales. Y es que ahora no se puede tener el lujo de dar un tubazo al día siguiente de ocurrido el hecho pues la velocidad del internet y de los dispositivos móviles no lo permite, cambiando así la manera de escribir.
El estudio de este año de tendencias mundiales demostró cómo el avance de las tecnologías afecta la forma de encontrar y verificar el contenido que es cada vez más diverso y donde hay múltiples versiones de una misma historia. Los periodistas, al replantearse la forma de contar las historias han optado por interpretar lo ocurrido, teniendo así la responsabilidad de analizar y darle valor a la noticia, inclinándose, de esta manera por el periodismo de investigación, el cual ha venido tomando gran importancia con el paso de los años.
La labor del periodista a pesar de los desafíos se mantendrá viva mientras existamos, sólo queda decirle no a la autocensura, ejercer el oficio sin miedo, mostrar el conflicto, los problemas, las causas y consecuencias; el pasado y las decisiones que se tomaron para superar una etapa, con la finalidad de sembrar esperanza al que lo necesite y demostrar que sí puede haber un cambio.
Aunque los periodistas venezolanos sufren el régimen más represivo de la historia, su labor está en poder contar la verdad más allá de los desafíos que se presenten, uno de ellos es cómo las nuevas tecnologías perjudican a los medios tradicionales y el cómo lo “inmediato” mata a lo impreso. Los periódicos han venido adaptándose a estos cambios, y los que lo han logrado han comprendido que la calidad de la noticia se ha ido perdiendo por la inmediatez que generan las plataformas de redes sociales. Y es que ahora no se puede tener el lujo de dar un tubazo al día siguiente de ocurrido el hecho pues la velocidad del internet y de los dispositivos móviles no lo permite, cambiando así la manera de escribir.
El estudio de este año de tendencias mundiales demostró cómo el avance de las tecnologías afecta la forma de encontrar y verificar el contenido que es cada vez más diverso y donde hay múltiples versiones de una misma historia. Los periodistas, al replantearse la forma de contar las historias han optado por interpretar lo ocurrido, teniendo así la responsabilidad de analizar y darle valor a la noticia, inclinándose, de esta manera por el periodismo de investigación, el cual ha venido tomando gran importancia con el paso de los años.
La labor del periodista a pesar de los desafíos se mantendrá viva mientras existamos, sólo queda decirle no a la autocensura, ejercer el oficio sin miedo, mostrar el conflicto, los problemas, las causas y consecuencias; el pasado y las decisiones que se tomaron para superar una etapa, con la finalidad de sembrar esperanza al que lo necesite y demostrar que sí puede haber un cambio.